Como ya se habrán dado cuenta, si
es que están leyendo este blog, soy nuevo en esto de publicar mis ideas en esta
plataforma o blog. Hasta esta mi cuarta publicación, he escrito siempre apegándome
a dos condiciones, la primera ser honesto y la segunda ser responsable.
La primer condición se refiere a hablar
de mi experiencia y conocimiento principalmente, no acostumbro ni pretendo literalmente
copiar ideas y traerlas a mi blog, no me sentiría conforme conmigo mismo. Inevitablemente
el conocimiento además de adquirirse por experiencia propia, se adquiere a
través de la experiencia de los demás, ya sea a través de algún libro, video o
incluso comunicación directa. Entonces es posible que algo de lo que publique
en este blog ya lo tengas en algún lugar de tu subconsciente, por esa razón
trataré de ayudar a ponerlo de manera más amigable a través de mi experiencia. La
segunda condición trata sobre respetar mi tiempo y atender los comentarios de
mis seguidores. Me propuse publicar mis temas cada semana, y hasta ahora así lo
que hecho. Además es un gusto hacer esto cada 8 días.
Y en relación a mi experiencia
sobre emprendimiento, en el anterior blog comenté acerca de compartir los
talentos, independiente del estatus laboral actual. Mi película mental, o
debería decir, mi visión del futuro es que todas las personas hagamos lo que
amamos hacer y obviamente para aquello que tengamos talento y cualidades. De hecho
en algunos países está cultura de trabajo ya se realiza. En países como
Alemania o Japón desde la primaria los chamacos reciben asesoría para
identificar sus fortalezas y hacer consiente al muchacho sobre sus fortalezas
para enfocarlo a desarrollar ese talento en beneficio personal pero también en
beneficio colectivo.
En Latinoamérica no hemos
desarrollado mucho esta cultura, sin embargo cada vez son más los casos en los
que gracias al talento combinado de varias personas, se ha logrado finalizar
proyectos interesantes, curiosamente de emprendedores (en otra oportunidad les
platicaré algunos casos).
Creo que para lograr este
propósito (el de compartir talento), es importante perder el miedo en el más
amplio de los sentidos. Precisamente hoy escuché a un paisano mexicano que
actualmente vive y trabaja en estados unidos, su nombre es Marco Antonio Regil,
conductor y emprendedor (esto último lo supe en esta misma charla). Escuchaba a
Marco hablar sobre el miedo, el comentaba que el miedo es una especie de freno
de mano que nos impide avanzar hacía el logro de nuestros sueños y metas. Considero
que tiene mucha razón en su reflexión. Cuántos de nosotros no hemos logrado
aquello que soñamos en la vida a causa del miedo?
En emprendimiento es bastante
común tener esta sensación, y hablando de compartir talento considero que es
necesario hacer a un lado este sentimiento y aventarnos (como decimos en
México), arriesgarse para ver materializados nuestras metas y objetivos. Ese miedo
al que pensarán o dirán otras personas de nuestras ideas, miedo a perder, miedo
a ser rechazado, a fracasar! Pienso que cuándo se trata de emprender, el
emprendedor siempre tendrá que tomar riegos medidos, por supuesto; pero
considero que casi de manera automática perder el miedo a compartir talento e
ideas con otras personas es el inicio de relaciones prosperas.
En mi caso he descubierto que
cuándo se pierde este miedo y confías en la otra persona, liberas esa
desagradable emoción y tu actitud cambia, incluso este proceso de desprendimiento
ayuda a liberar la creatividad y a madurar las ideas. El proceso de explicar tu
idea a alguien (sin el miedo al que dirán) facilita el entendimiento propio. Me
ha pasado en varias ocasiones que mi idea no era tan solida como yo pensaba, o
alguna parte del proceso requería mayor atención o un enfoque distinto para
mejorarlo y cuándo compartí mi idea con mi socio u otro emprendedor identifiqué
las áreas de oportunidad y regrese a mejorar mi proyecto. Incluso mis socios me
han ayudado a fortalecer mis ideas y a lograr resultados certeros, con menor
desgaste y más rápido.
Una vez que quitamos este freno de mano, vamos
adquiriendo con la practica mucha más experiencia. Esta conducta aprendida nos
dará las pautas para evaluar todos los riesgos de manera más ágil y rápida. De esta
manera sabremos también en que momento y a quién confiar nuestra información. Obviamente
hablando de riesgos medidos es importante tomar todas las consideraciones
importante de inicio, por ejemplo temas legales! Aunque perdamos el miedo y
tomemos riesgos medidos no vamos a hablar de nuestros proyectos de trabajo con
todo mundo. Debo decir que en muchos casos tuve que aprender a identificar estos
riesgos cometiendo errores, pero creo firmemente que de no haber tomado esos
riesgos, en este momento estaría aún incluso pensando en crear y publicar en mi
blog………..
Así que, perdamos el miedo,
tomemos riesgos medidos y aventémonos a materializar nuestros sueños!!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario